Por Adrián Luciani – info@argenports.com
Bahía Blanca se prepara para una transformación vial decisiva: el puerto inició el desarrollo del proyecto ejecutivo que permitirá licitar la construcción de una autovía de doble calzada, diseñada para tránsito pesado, mayor seguridad y operación logística más eficiente hacia las áreas portuarias e industriales.
No se trata de una obra menor ni de mantenimiento, sino de una intervención estructural que apunta a modificar la forma en que circulan camiones, se articulan accesos y se sostiene la competitividad logística de la región.
La iniciativa forma parte de un programa nacional destinado a mejorar corredores prioritarios de la red vial argentina, especialmente aquellos vinculados con la integración logística del Mercosur.
En ese esquema, el corredor bahiense ocupa un lugar estratégico porque cumple un rol clave en la conectividad terrestre entre grandes polos productivos y nodos portuarios de escala nacional como Rosario y Bahía Blanca.
El proyecto corresponde a la Sección 4 de la obra “Ruta Nacional Nº 3 – Paso por la Ciudad de Bahía Blanca”.
El tramo comienza a partir del distribuidor del paraje El Guanaco, se despliega en un arco que rodea el área urbana e interconecta sectores operativos hasta el distribuidor a distinto nivel del paraje Loma Paraguaya.
Esta intervención completa la vinculación funcional entre RN 3, RN 35 y RN 33, conformando un corredor vial de altísima relevancia logística e industrial.
El proceso licitatorio fija plazos concretos para quienes quieran participar: la presentación de ofertas vence el 6 de febrero de 2026 a las 10.30, y la apertura de sobres se realizará ese mismo día a las 11, en la sede del Consorcio de Gestión del Puerto.
Un corredor clave para el puerto, la industria y la energía
Se trata de uno de los sectores con mayor concentración de tránsito pesado de toda la región.
Por allí circulan diariamente camiones que operan cargas hacia las terminales portuarias de Ingeniero White y Galván, vehículos vinculados a la Central Térmica Comandante Luis Piedrabuena y al intenso movimiento industrial del Polo Petroquímico Bahía Blanca.
Las exigencias actuales ya superan la capacidad funcional del corredor, tanto en flujo como en seguridad y previsibilidad operativa, por lo que la obra apunta a ofrecer una respuesta integral y de largo plazo.
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El desarrollo del proyecto ejecutivo generará la documentación completa para licitar la futura autovía. El diseño contempla obra básica integral, ensanche de traza existente, nuevos pavimentos estructurales para tránsito pesado, obras de arte, distribuidores a igual nivel y colectoras parciales, que permitirán ordenar la circulación e independizar el tránsito local del flujo logístico principal.
El objetivo es ampliar capacidad, uniformar niveles de servicio, reducir tiempos operativos y disminuir la tasa de accidentes.
Autovía de doble calzada y mayor capacidad logística para Bahía Blanca
El pliego fija como meta ampliar la capacidad operativa de la traza, mejorar los accesos a industrias ubicadas a lo largo del recorrido, garantizar mayor seguridad vial y asegurar niveles de servicio acordes al peso que hoy tiene Bahía Blanca dentro del sistema portuario nacional.
El tramo proyectado busca acompañar el crecimiento del movimiento de cargas, sostener competitividad y consolidar al distrito como nodo estratégico del transporte argentino y regional.
Una vez finalizada esta etapa técnica quedarán definidas alineaciones, parámetros estructurales del pavimento, sistemas de drenaje, condiciones de seguridad, funcionalidad de distribuidores e integración con accesos portuarios e industriales.
Eso permitirá dar el paso siguiente: la licitación de una obra considerada estratégica para la logística del Puerto de Bahía Blanca y su hinterland productivo.
Cuando la autovía esté ejecutada, el corredor operará bajo estándares superiores: mayor capacidad para tránsito pesado, menor congestión, tiempos logísticos más eficientes, mejor seguridad vial y previsibilidad para puertos, industrias y operadores.
Será una transformación vial alineada con el papel que Bahía Blanca cumple como nodo portuario, energético e industrial de escala nacional e internacional, clave dentro de los corredores del Mercosur.
