Contessi teme que el nuevo buque del Inidep termine siendo adjudicado a un astillero español

Redacción Argenports.com

   Una vez más, como viene sucediendo desde hace ya bastante tiempo, Domingo Contessi, presidente del astillero marplatense Federico Contessi y Cía S.A., no ahorró críticas por la situación económica que atraviesa el sector durante la botadura de un nuevo buque, esta vez el pesquero Yani G.

   Pero además, al hacer uso durante el acto, el empresario hizo hincapié en lo que a su entender es una casi segura adjudicación, por parte del Estado Nacional, de la construcción de un buque para el Inidep a un astillero español.

   Cabe recordar que en marzo pasado el Consejo Económico y Social de la Industria Naval presentó una nota formal al ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, manifestando su profunda preocupación respecto a la posible licitación internacional para la construcción de un Buque de investigación para el INIDEP que sería parcialmente financiado con un crédito del BID.

   Allí se resaltó que en nuestro país existen astilleros públicos y privados con capacidad y experiencia suficiente tanto para construir como para desarrollar la ingeniería de un buque de este tipo y que, sobre la base del artículo 15 de la ley 27.418, debe ser de construcción local”.

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   Ayer Contessi, tras enumerar varios aspectos de la situación económica que castigan duramente al sector y reclamar por un dólar competitivo y la erradicación del flagelo de la inflación, se refirió a la futura licitación del mencionado barco de investigación, con características ICE CLASS.

  El empresario dijo que si el astillero y el armador (refiriéndose al Yani G) se hubiesen puesto a hacer un costeo mensual, nunca habrían llegado a esta botadura y su construcción se habría interrumpido, tal como se frenaron otros proyectos.

   Dijo que este barco se bota sin contrato y sin porque cómo van a poder determinar su valor si ni siquiera pudieron aún girar las divisas necesarias para pagar la chapa naval que se utilizó durante su construcción.

   “¿Se entiende ahora la profesión de fe en el país por parte del Astillero y de la empresa armadora que implican este tipo de emprendimientos? Ahora si armador y astillero lo hacemos, si nosotros confiamos, ¿porque no lo hace el propio Estado?

   “¿A qué me refiero? –agregó--, me refiero por ejemplo a que el INIDEP pretenda lanzar en este momento una licitación internacional para construir un barco de 100 millones de dólares, financiado por un crédito del BID y que seguramente será adjudicado al mismo Astillero español que le construyó los dos anteriores, porque las especificaciones técnicas son iguales a otro buque que esa misma firma ya está construyendo”.

   Al respecto, recordó que Argentina cuenta con astilleros públicos y privados con capacidad para construir ese tipo de buques.

   “Tenemos Universidades y estudiantes de ingeniería que han recibido premios internacionales por diseñar esa misma clase de buques. Lo que claramente hoy no tenemos son las condiciones económicas para poder cotizar y ser competitivos. Creo que no hace falta que lo vuelva a explicar, ¿no?

   “Nosotros mismos aspiramos en algún momento a construir y exportar buques de ese tamaño, para ello estamos haciendo la nueva nave industrial; pero pretender que un Astillero Argentino participe hoy, en estas condiciones, de una licitación internacional es como que nos quiebren las piernas, nos roben las muletas y luego nos inviten a correr y ganar una maratón. Imposible”, sostuvo.

   También aludió a la Ley de Industria Naval 27.418, que estipula específicamente que los buques que necesitan los organismos del Estado deben ser construidos en el país, en tanto exista capacidad de construcción nacional, lo cual, en su opinión, está sobradamente probado.

   Además, señaló que ka ley no habla de porcentajes ni de excepciones ante el financiamiento con créditos internacionales.

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Sobre la industria del offshore

   “A mis espaldas, en el medio del mar, comienza a vislumbrarse otra oportunidad de progreso para Argentina con la explotación petrolera offshore. Allí también hay una elección pendiente. Tendremos que elegir entre el modelo industrialista que adoptaron Noruega y Brasil y que generó una revolución no solo en sus respectivas industrias navales, sino en sus industrias en general. O si por el contrario, adoptamos el modelo extractivista de Nigeria y Angola, que posiblemente mueve similar cantidad de barriles de petróleo, pero sin repercutir en las industrias y empleos de sus respectivos países.

   “Podrán tildarme de mal pensado –continuó--, pero a la luz de los antecedentes creo que ya hemos elegido. Seremos Angola. ¿Cómo vamos a pretender que las empresas petroleras extranjeras construyan sus buques y su equipamiento en el país cuando el propio Estado no lo hace?”.

   Luego dirigió sus cuestionamientos a todos los sectores políticos en general.

    “Y que por favor ningún partido político se haga el desentendido y piense que estoy hablando de otros, porque este tipo de actitudes ha sido transversal a todos los gobiernos recientes con importaciones de lanchas patrulleras y OPV durante la gestión de Cambiemos, de barcos de investigación en ambos gobiernos, además de estos intentos ahora. Y podemos imaginar cuál sería el criterio en un eventual gobierno donde solo primen las leyes del libre mercado.

Chile está construyendo su buque Polar y acaba de botar un barco de Investigación Pesquera, Colombia está construyendo su cuarta OPV, Brasil construye hasta sus propios submarinos nucleares, mientras Argentina, que supo tener una industria naval mucho más desarrollada que la de esos países, hoy es meramente testimonial y buscamos todo en el extranjero”.

   Contessi luego pidió disculpas por los tonos y la energía.

   “Estamos cansados. Esto no es una cuestión de ideologías, no es una cuestión de recetas económicas, es una cuestión de patriotismo, de sentido común y de supervivencia. No podemos tener universidades pero no confiar en nuestros ingenieros, no podemos tener astilleros y no confiar en sus capacidades, no podemos tener leyes y no respetarlas. Sortear cada día tantísimos obstáculos y además esto. ¡Por favor, dejemos de boicotearnos entre nosotros mismos!

   “Como decía al comienzo, la esperanza no la hemos perdido. Ojalá que el próximo gobierno pueda resolver el flagelo de la inflación, introducir las reformas que nuestra economía necesita para salir de estos ciclos de crisis recurrentes y tener el patriotismo necesario para defender el trabajo de los argentinos”.

Especificaciones técnicas del Yani G

   El “Yani G” es un buque pesquero de altura, especialmente diseñado para operar en nuestras costas y que responde al prototipo 27 AC-VC.

   Se trata de una embarcación versátil, apta para realizar pesca de arrastre y media agua y tendrá a Mar de Plata como puerto de asiento, a cargo de Vicarp S.A. propiedad de Antonio «Carpincho» García

   El nuevo pesquero tiene una eslora de 25.50 metros y una manga de 7.80 metros. Posee un motor principal Caterpillar 3508C, y dos motores auxiliares Cummins NTA 855-D (M), uno a cada lado de las bandas.

   Según Contessi, la calidad constructiva de este buque no tiene nada que envidiarle a los del primer mundo” y explicó que se trata del octavo barco de una nueva generación que se botó en poco más de dos años.

   “Algunos dudaban que la renovación de la flota pesquera era posible. Y estamos demostrando que se puede, con buques de primera línea, diseñados y construidos por argentinos”, puntualizó.