Hacia el futuro. Las inversiones implican la construcción de un segundo patio de contenedores y un muro de contención de 700m, que aumentaría la capacidad de la terminal a 2,5 millones de TEU al año,
Redacción Argenports.com
Representantes de la multinacional Katoen Natie adelantaron que, de la mano del crecimiento de su capacidad de carga, Terminal Cuenca del Plata (TCP), la sociedad público-privada que administra la terminal única de contenedores del puerto de Montevideo, triplicará sus puestos de trabajo desde sus actuales 500, aproximadamente, a unos 1.500.
El anuncio fue hecho durante la exposición brindada ante la Comisión de Transporte y Obras Públicas del Senado del vecino país.
Según el diario uruguayo El Observador, la información fue brindada el miércoles pasado por Gerolf Annemans, gerente de Operaciones Portuarias de Katoen Natie, Vincent Vandecauter, gerente General de TCP, Fernando Correa, gerente de Relaciones Institucionales de TCP y el asesor letrado de la empresa Paul Arrighi.
En la presentación de TCP Katoen Natie también expusieron vía zoom, integrantes del equipo de Arbitraje Internacional del estudio Dechert con sede en París, Eduardo Silva Romero, Antonio Gordillo, Santiago Dellepiane y Daniela Bambucci.
En la oportunidad, analizaron el nuevo acuerdo con Uruguay que prolongará esta sociedad por 50 años.
Según explicó la empresa belga es razonable en este tipo de actividades en todo el mundo. Por ejemplo, en los últimos seis años puertos como Baltimore, Oakland y Delaware en Estados Unidos, Darwin en Australia, o Barcelona en España, firmaron contratos de concesión con operadores privados por entre 50 y 99 años.
Asimismo, según El Observador, la empresa reivindicó el valor que este acuerdo tiene para la soberanía nacional. “No hay mejor forma de defender la soberanía del país que defender su puerto”, sostuvo Correa.
En la comisión del Senado, Vandecauter, explicó que la concesión que se inició a fines de 2001 permitió que el puerto de Montevideo dejara de ser una terminal “obsoleta y anquilosada a ser, hoy, un puerto moderno e integrado al mundo, con una enorme proyección de futuro y capacidad de crecimiento”.
En los últimos 20 años, la única terminal de contenedores del puerto de Montevideo multiplicó por más de cuatro veces su superficie, por siete veces su cantidad de grúas, por más de dos veces su longitud de muelle y mejoró su capacidad de recibir buques de gran calado.
De hecho, el puerto de Montevideo es, en el contexto regional, “el mejor de la clase”, aseguró Vandecauter.
El nuevo acuerdo convertirá a esta terminal en la más moderna de Latinoamérica y de “vanguardia” desde el punto de vista de su infraestructura y de su tecnología, explicaron los ejecutivos de Katoen Natie.
Por otra parte, informaron que muchos de los principales puertos de la región y del mundo avanzan hacia la concentración de terminales en un mismo operador, dado que eso les permite competir en mejores condiciones con otros puertos.
Como ejemplo citaron los puertos brasileños de Río Grande, Itajai, Itapoa y Paranaguá.
De acuerdo con los representantes, en el puerto de Montevideo se instaló por la vía de los hechos una segunda terminal de contenedores, de forma “ilegal” pero “tolerada” por el Estado, que generó una situación “injusta” y dañó la actividad de TCP.
La empresa belga planteó esta situación a los gobiernos, con la intención de evitar llegar a acciones jurídicas que implican altos costos en dinero y tiempo.
“Katoen Natie es una empresa enfocada en hacer. No tiene ánimo litigante ni de conflicto, sino que apela a las herramientas jurídicas solo si constituyen el último recurso”, sostuvo Annemans.
En la reunión parlamentaria, el abogado Romero, líder del equipo de Arbitraje Internacional del estudio Dechert con sede en París, y con experiencia en disputas que involucran a Estados y entidades estatales, explicó que el Estado uruguayo se exponía a un arbitraje internacional con un inminente fallo en contra por haber “incumplido las obligaciones que asumió”.
Asimismo, analizó antecedentes jurídicos y desarrolló una argumentación para sostener que este caso sería diferente a otros en los cuales Uruguay ganó.
Romero informó que el monto razonable para un reclamo internacional al Estado uruguayo se hubiese situado en algo más de US$ 1.500 millones.
Para llegar a esa conclusión citó un estudio liderado por el experto Dellepiane, integrante de la firma BRG con sede en California y líder de su equipo de Arbitrajes Internacionales.
El nuevo acuerdo alcanzado por ambos socios no solo evitará el reclamo en tribunales internacionales, sino que permitirá una inversión de US$ 455 millones con la que el puerto ampliará su capacidad a tal punto de que podrá recibir, en un mismo momento, a dos barcos del mismo tamaño que el que mantuvo bloqueado el canal de Suez durante varios días hace algunas semanas, ejemplificaron los ejecutivos de la empresa belga.