Por Redacción Argenports.com
Aunque la temporada de pesca de langostino ya fue habilitada, las principales cámaras empresarias del sector pesquero anunciaron que no saldrán a operar debido a una crítica situación económica.
Denuncian que el costo de producción supera el precio internacional de venta, lo que vuelve “inviable” cualquier intento de zarpe.
La medida afecta a 113 buques pesqueros, cuya actividad en la última temporada generó más de 600 millones de dólares en capturas.
Según los armadores, la decisión de mantener la flota amarrada desde el 17 de marzo busca visibilizar una crisis de rentabilidad que amenaza la sostenibilidad de una de las principales economías exportadoras del país.
El reclamo fue formalizado a través de un comunicado conjunto firmado por las cámaras CEPA, Capeca, Caipa, Caapba, AEPC, UDIPA, Cafrexport, Capip y CAPA.
Las entidades solicitaron al Ministerio de Trabajo la convocatoria a una audiencia urgente con los gremios del sector para revisar condiciones laborales y avanzar en una negociación colectiva.
Un dólar de pérdida por cada kilo pescado
Los empresarios advirtieron que el precio internacional del langostino cayó a US$ 5,50 por kilo, mientras que los costos operativos internos ascienden a US$ 6,50, lo que implica una pérdida de un dólar por kilo pescado. “Es inviable salir a pescar”, sentenciaron.
Como agravante, señalan un convenio colectivo de trabajo desactualizado, que establece un bono por productividad basado en valores de mercado ya desfasados.
“La tripulación cobra como si el kilo valiera 12 dólares, cuando hoy está en 5,50”, explicaron desde el sector empresario al medio Infobrisas
Impacto nacional
La parálisis de la flota podría afectar directamente a puertos clave como Mar del Plata, Puerto Deseado y Puerto Madryn, donde estas embarcaciones realizan sus operaciones habituales.
Además, el sector advirtió que está en riesgo la sostenibilidad económica de una industria que en 2024 exportó por más de 2.000 millones de dólares, representando el 3,9% del total exportado por el país.
El comunicado subraya que en la última década el complejo pesquero argentino generó divisas por más de 17.000 millones de dólares, lo que lo convierte en un sector estratégico para la economía nacional.
Sin embargo, la combinación de costos crecientes, caída de precios internacionales y competencia de productos de cultivo configura lo que definen como una “situación de quebranto”.