Las cargas a granel de aceites, harinas, granos, entre otros productos, son despachados mayoritariamente por la Hidrovía, totalizando más del 83% de este tipo de cargas a nivel nacional. Foto Buques del Paraná.
Redacción Argenports.com
Teniendo en cuenta diversos factores, todo hace suponer que la próxima década tendrá un común denominador: la incertidumbre.
Hasta no hace mucho la inflación y las guerras eran tomados como sucesos particulares, y no elementos generalizados por la economía.
Los mercados de valores, los resultados de las empresas y las variables macroeconómicas eran considerados como los principales elementos, en muchos casos los únicos que se tomaban para analizar las perspectivas de una economía.
La pandemia, el conflicto ruso-ucraniano, la crisis de las cadenas globales de valor, entre otros elementos, ingresaron al radar de seguimiento de las economías globales, y esperan afectar sustancialmente la dinámica económica de la próxima década, según un trabajo de la Bolsa de Comercio de Rosario realizado por Julio Calzada, Guido D’Angelo, Federico Di Yenno, Alfredo Sesé, Javier Treboux, Bruno Ferrari y Pablo Ybañez.
El camino hacia 2031 del transporte de cargas de la Argentina no debe perder de vista estos factores. Hoy nuestro país dispone de un volumen de cargas que supera las 542 Mt, de acuerdo con los datos consolidados de 2021.
El eje fundamental de las cargas de nuestro país se concentra sobre el camión, que representa cerca del 92% del transporte interno argentino.
Detrás de este importantísimo medio logístico se encuentra el transporte ferroviario, y en una considerable menor medida, el transporte aéreo de cargas.
En lo que hace a la exportación de parte de estos volúmenes, las cargas a granel de aceites, harinas, granos, entre otros productos, son despachados mayoritariamente por la Hidrovía totalizando más del 83% de este tipo de cargas a nivel nacional.
Por su parte, el transporte de cargas en containers se distribuye con más peso sobre Buenos Aires, con las terminales del puerto de la capital embarcando cerca del 47% de los containers que se exportan en nuestro país.
Atravesados por estos datos y este contexto global, se proyecta un crecimiento del 18% en el transporte de cargas argentino para los próximos diez años.
De esta manera, se pasaría de 542 a casi 640 Mt transportadas. Desagregando este dato consolidado, el transporte automotor y el ferroviario aspiran a crecer en línea con este número.
No obstante, el transporte fluvial interno por la hidrovía se proyecta creciendo al 22%, por encima de las otras modalidades.
Una tasa de crecimiento de transporte que no supera el 2% anual da cuenta que nos encontramos en un escenario donde resulta fundamental ser moderado en las proyecciones.
El conjunto de factores geopolíticos, económicos y sociales que pueden afectar el crecimiento de la economía mundial y nacional obliga a limitar las perspectivas de desempeño económico.
La progresiva salida de esta pandemia, conjugada con importantísimos planes de estímulo a nivel mundial, han desatado un nuevo proceso inflacionario en muchas economías centrales.
Los precios en alza están llevando a incrementos de tasas de interés en el mundo, lo que encarece y limita el crédito a nivel general, y especialmente en países emergentes como Argentina.
No conforme con ello, el crecimiento de China se ve muy limitado. El gigante asiático inició este siglo con tasas de crecimiento siempre cercanas a los dos dígitos, mostrando su pico de crecimiento en 2007, cuando amplió su economía un 14,2%.
La tasa de crecimiento desde entonces mostró una tendencia decreciente y las últimas proyecciones dan cuenta de un repunte económico en torno al 3,5% para 2022.
Las múltiples tensiones chinas ponen signos de interrogación para el crecimiento de comercio mundial en la década venidera, lo que podría afectar con ímpetu a nuestro país.
Desagregando el crecimiento de cada medio de transporte de cargas en Argentina, resulta conveniente comenzar por el camión.
El principal medio de transporte del país lleva mayoritariamente granos y minerales.
Para la proyección de cargas de cada uno de estos componentes se utilizan estimaciones propias de producción y transporte propias de la Bolsa de Cereales de Rosario, en consonancia con proyecciones de instituciones como la FAO y documentos y estimaciones oficiales del gobierno argentino.
En línea con las proyecciones productivas, se espera un crecimiento del transporte ferroviario por encima del transporte automotor en términos relativos.
Actualmente las cargas por camión son más de veinte veces las cargas trasladadas por la logística ferroviaria.
Sin embargo, la política de open access que está implementando el Gobierno Nacional podría promover aún más el transporte ferroviario y apuntalar esta tasa de crecimiento por encima de estas estimaciones.
Cabe destacar que más de la mitad de las cargas que se suben a los trenes que recorren el país consisten en productos de la agroindustria.
El transporte aéreo de cargas también ambiciona crecer por encima del transporte terrestre.
Los principales aeropuertos para cargas domésticas son Neuquén y Salta, mientras las cargas internacionales se distribuyen entre Ezeiza, Tucumán, Aeroparque, Córdoba y Rosario.
No obstante, las cargas aéreas siguen representando un volumen muy pequeño con relación al total transportado en Argentina.
Desde Corumbá (Brasil) bajaron por la Hidrovía hasta Campana-Zárate en barcazas casi 14 Mt en el año 2020.
El Complejo Soja aquí tiene un rol preponderante, con el protagonismo de la soja paraguaya que llega hasta el Up River para mezclarse y ampliar la calidad proteica de la harina de soja argentina.
Por su parte, haciendo el viaje en sentido contrario, en dirección aguas arriba viajaron más de 5 Mt de cargas en 2020.
Las mismas consistieron fundamentalmente de combustibles y cargas generales en containers.
Los fertilizantes cierran el podio de cargas aguas arriba de la hidrovía, de la mano de la creciente importancia de la agricultura de Paraguay.
Hablando estrictamente de las cargas de cabotaje en Argentina, encontramos que la mayoría de los embarques internos consisten en granos y combustibles. Totalizaron cerca de 1,1 Mt en 2020.
Asimismo, según estimaciones el movimiento de contenedores en Argentina podría llegar en 2031 a 2.100.000 TEUs. (Unos 330.000 contenedores anuales más que en 2021).
El crecimiento espera darse con fuerza en el lustro venidero, para luego desacelerarse de cara al fin de esta década.
En lo que se refiere especialmente a los volúmenes de exportación, la Hidrovía cumple un rol fundamental ya que por allí se embarca el 83% de las exportaciones de bienes de la Argentina.
El Up River cumple un papel esencial dentro de esta importantísima vía navegable, concentrando el grueso de las cargas que son exportadas. Ningún otro nodo en el mundo despacha tanta soja como el Up River, que es a su vez el segundo nodo exportador más importante del mundo en cargas totales.
En todo este marco, la Hidrovía aspira a poder acompañar el crecimiento de las cargas internas de la Argentina.
En la próxima década se espera que las cargas totales sobre esta vía fluvial superen las 114 millones de toneladas, lo que significa un crecimiento superior al 22% para los embarques desde la Hidrovía Paraná-Paraguay.