El grumete “Santa Cruz” que era timoneando por Tettamanti y tripulado por Martín Bond, junto a dos isleños, fue el primero en llegar a la meta.
El pasado 10 de junio se recordó el Día de la Reafirmación de los Derechos Argentinos sobre las Islas Malvinas, jornada instaurada por el Congreso Nacional el 14 de noviembre de 1973, pocos meses antes de la realización de una serie de regatas que pasó a la historia al tener como protagonista a un joven de 19 años llamado Horacio Tettamanti, quien ganó esa competencia realizada en las Islas.
La historia señala que promediaba el mes de marzo de 1974, cuando el buque de transporte naval “Bahía Buen Suceso” desembarcó en Puerto Argentino cuatro veleros clase “grumete” del Club Universitario Buenos Aires (CUBA) que bajo el lema “El Mar Nos Une” corrieron la primera regata en la historia de las Islas Malvinas.
El grumete “Santa Cruz” que era timoneando por Tettamanti y tripulado por Martín Bond, junto a dos isleños, fue el primero en llegar a la meta.
Tras la competencia, los grumetes Santa Cruz (exCalquin) y el Ushuaia (exMalu) fueron donados por el CUBA y quedaron en Malvinas para que los jóvenes aprendieran a navegar. Los nuevos nombres con que fueron bautizados los veleros hacían referencia a lugares emblemáticos de la Patagonia.
Tettamanti no recuerda el día exacto, pero sí que fue en mitad de marzo de 1974.
En diálogo con LU12 AM680, Horacio Tettamanti -quien es ingeniero naval y fue subsecretario de Puertos y Vías Navegables durante el gobierno de Cristina Kirchner-, recordó ese trascendental episodio del cual fue protagonista.
“Es un tema que vale la pena recordar porque tiene un sustrato muy importante. Debemos rememorar que por entonces el presidente era Juan Domingo Perón, y no fue un hecho aislado deportivo individual, sino que formó parte de una cadena de hechos muy trascendentes a los que, tal vez, la historia no rescató adecuadamente. Lo cierto es que la Argentina, a mi criterio, por entonces vivió un momento histórico y quizás el más cercano a poder recuperar las Islas”, consideró.
Horacio Tettamanti.
Tettamanti repasó que “estas regatas que se hicieron fueron parte de una serie de hechos relevantes. Primero, debemos mencionar el acuerdo del Río de la Plata, que clausuraba un viejo conflicto con Uruguay y esto se vincula absolutamente con la dinámica del conflicto del Atlántico Sur ya que hay muchos documentos, y a mí me resulta absolutamente convincente, de que el general tenía claro que Argentina no podía proyectar sus aspiraciones y derechos soberanos en el Atlántico Sur teniendo una situación incierta e inestable en el Río de la Plata”, analizó.
“Y creo que eso -continuó- fue un poco el prolegómeno de algo en lo que después avanzó; porque existen, y están los documentos en el Museo de Malvinas, borradores donde quedaba de manifiesto que se avanzaba firmemente en una especie de proceso de recuperación paulatina de las soberanía”, destacó.
De esta manera, Tettamanti relaciona a la regata como “el primer hecho en función de esos acuerdos preliminares” o “la primera operación importante que se pone en marcha con la regata a vela de embarcaciones organizada por la Armada Argentina, con la participación del buque Bahía Buen Suceso, una importante delegación del Club Universitario de Buenos Aires, donde practicaba el deporte de vela con un montón de dirigentes y deportistas, mediante acuerdo con el gobierno inglés.
Esas regatas fueron muy importantes, y tengo el recuerdo de haber ganado la primera que quedó grabada a través de esa foto histórica donde se puede ver el ingreso a la bahía de Puerto Argentino. Después de la competencia nos quedamos a enseñar vela a las isleñas”, recordó.
Tettamanti lamentó que, si bien entonces se estableció una relación y fue una “hermosa etapa” eso dio que pensar que se podía “ir por esa línea que nos iba a llevar quizás a buen puerto” con relación al reclamo argentino sobre las Islas Malvinas.
“Con la edad que teníamos, nos hicimos amigos de las compañeras malvinenses rápidamente. Fue un vínculo muy lindo. Y tuve la oportunidad de volver luego”, contó.
Uno de los recuerdos que Tettamanti guarda con mucha claridad tiene que ver con la presencia argentina en las islas por aquellos años.
En ese sentido, señaló: “Para la competencia algunos participantes llegaron en el buque con las embarcaciones, pero en mi caso, que era estudiante, llegué en aviones de la Fuerza Aérea, que aterrizaban en una pista que había sido inaugurada en 1972, como obra pública del Estado Argentino”.
Además, agregó: “Cuando uno llegaba a las Islas, se encontraba con los grandes tanques de YPF y la presencia de un destacamento de la Fuerza Aérea, porque incluso el aeropuerto era operado por oficiales de la Fuerza Aérea Argentina.
Todo lo que era combustible y energía la suministraba Argentina. E incluso gran parte de los jóvenes con los que conversamos tenían la aspiración de venir al país a estudiar.
"Recuerdo que muchos tenían el deseo de ir a la provincia de Córdoba. Por lo que, tras las regatas, nos vinimos con la idea de que Argentina iba a poder avanzar con eso (de la soberanía), pero bueno, lo demás es historia conocida”, dijo
Fuente: La Opinión Austral.
Bahía Blanca / Buenos Aires / Argentina
