Una escena inusual paralizó por momentos las calles de Valdivia: el traslado de la proa del Magellan Discoverer, el primer crucero híbrido-eléctrico construido en América, generó asombro entre los habitantes locales.
La operación movilizó una estructura de 630 toneladas desde una planta a otra del astillero ASENAV, cruzando incluso la transitada Avenida España en el sector de Las Ánimas.

Operación de traslado en las calles de Valdivia.
El Magellan Discoverer es un proyecto de la empresa Antarctica21, que busca ofrecer expediciones sustentables al continente blanco.
Su construcción avanza dentro de las instalaciones de Astilleros y Servicios Navales (ASENAV) en Valdivia, y ya se completó un 60% del buque.

El crucero tendrá una capacidad para 96 pasajeros y una tripulación de 67 personas, brindando instalaciones de lujo, como habitaciones espaciosas, gimnasio, sauna panorámica y restaurantes.
El gerente de Desarrollo de Negocios y Marketing de ASENAV, Germán Schacht, destacó el significado del proyecto:
“Este crucero dejará nuestro nombre en las páginas de la historia de la construcción naval, al ser el primero de su tipo en todo el continente”, señaló.

La nave tendrá dimensiones de 94 metros de largo, 17,20 metros de ancho y 30,5 metros de altura, siendo así uno de los cruceros más imponentes en su tipo.
Tecnología chilena para un turismo más sustentable
El Magellan Discoverer es una embarcación de diseño completamente chileno y está pensada para operar en las frágiles aguas de la Antártica. Su sistema híbrido permitirá una navegación más limpia y silenciosa:
- No emitirá CO₂ durante sus trayectos eléctricos.
- Reducirá de forma significativa el ruido submarino.
- Disminuirá el impacto sobre la fauna antártica.
Una obra de ingeniería con impacto regional
El traslado de esta gigantesca sección del casco fue parte del proceso de ensamblaje entre las plantas internas de ASENAV.
La logística del movimiento captó la atención tanto por su complejidad técnica como por el simbolismo: se trata de un paso más hacia la materialización de un buque que representa una nueva etapa para la industria naval chilena y el turismo científico y de exploración en el hemisferio sur.
El crucero se encuentra en plena etapa de construcción y se espera que esté terminado antes de fin de año.