La bajante del Paraná vuelve a complicar la exportación de granos

Por Adrián Luciani / Argenports.com

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   La bajante del río Paraná vuelve a ser noticia estos días y comienza a complicar la logística de granos por la Vía Navegable Troncal.

   Fuentes consultadas por Argenports.com señalaron que ya hay varios barcos cargados que se encuentran fondeados con más de 10 metros de calado y que se ven imposibilitados de navegar porque la determinante en algunos sectores es de 8,88 metros.

   “Argentina no tiene facilidades para alijar esos buques y los costos serían siderales. Ahora sólo queda dragar y dragar”, señalaron.

   Al mismo tiempo, la situación seguramente hará que más buques completen bodegas en los puertos de Bahía Blanca y Quequén, o incluso también en Brasil, mientras que otros que ya tenían previsto esa tarea deban completar un tonelaje mayor.

   “Hay cinco barcos parados por estar pasados de calado producto de la violenta bajante del río. Una situación similar ocurrió en 2019, cuando se registraron picos de bajante”, consignó el portal de noticias santafesino San Lorenzo 24.

   “La sorpresa de una bajante violenta del Río Paraná de algo más de 20 centímetros por día hizo que al menos 5 barcos que estaban cargados con calados de 10 metros deben esperar las indicaciones para poder zarpar aguas abajo o en el peor de los casos tengan que descargar mercadería con una maniobra costosa de alije, un barco con este calado de carga tiene que descargar cerca 8.500 toneladas”, agregó.

   Incluso no deben dejar de ser tenidas en cuenta las graves falencias que en materia de seguridad para la navegación evidencian varios tramos del río Paraná, según denunció días atrás la Asociación Civil de Prácticos de la República Argentina.

   Precisamente, en una nota dirigida a las autoridades nacionales, la entidad denunció problemas de bajo fondo, falta de dragado en varios pasos críticos, y ausencia de balizamiento y mantenimiento de señales, marcando un panorama complicado para la logística de granos argentina en la próxima cosecha gruesa.

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Varadura de un granelero

   Seguramente dicho escenario guarda relación con la varadura, el sábado pasado, del granelero Clara Insignia, al sur de la ciudad de San Nicolás, en el kilómetro 338 del río Paraná.

   El bulk carrier había partido con 32 mil toneladas de trigo desde San Lorenzo rumbo al puerto de Bahía Blanca, y recién el martes a la noche pudo ser liberado por tres remolcadores, al tiempo que la navegación fue reestablecida ayer en horas de la tarde, con las consiguientes pérdidas económicas para el sector agropexportador y naviero.

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   Pudo saberse que varias dragas trabajan para reestablecer las condiciones del río en pasos claves como Alvear, Las Hermanas y Paraguayo.

La draga Afonso de Albuquerque trabaja para asegurar la profundidad de pasos claves.

Un río a la baja

   Pero mientras se busca lograr recuperar una determinante que supere los 10 metros, la bajante no ayuda.

   Por ejemplo, el lunes el río ya estaba por debajo de los dos metros en el puerto de Santa Fe, lo que marca un descenso de casi 3,50 metros desde diciembre de 2023 y de dos metros en tan solo 20 días.

   El experto en clima Pablo Lucero indicó al medio Aire que este rápido descenso del nivel del río en el puerto de Santa Fe no es una situación habitual.

   En ese sentido, explicó que desde principios de febrero el río Paraná bajó entre 15 y 18 centímetros cada 12 horas.

   "Desde el sábado 3 de febrero, que estaba en 3,98 metros, hasta este lunes bajó dos metros en menos de 20 días", señaló.

   Incluso el último informe del Instituto Nacional del Agua (INA) sobre la altura del río en los puertos de esa región muestra que se espera que la bajante se acentúe en los próximos días.

   “Así como no llovió en la provincia en enero y principios de febrero, sobre la cuenca brasileña llovió poco y el río baja”, le dijo a Agroperfiles Hugo Rohrmann, especialista en temas hídricos.

   Otro factor –apuntó– es la retención de las represas brasileñas del Paraná, no del Iguazú, aclaró.