Por Redacción Argenports.com
El puerto de Montevideo atraviesa un escenario complejo en 2025 debido a una fuerte caída en la actividad de contenedores.
De acuerdo con los datos difundidos, el movimiento total en este segmento registra una disminución cercana al 30% en comparación con el año anterior, afectando especialmente al tránsito y transbordo de cargas, rubros que históricamente fueron determinantes para el posicionamiento logístico del puerto.
La merma se refleja tanto en las operaciones de importación y exportación como en el movimiento de contenedores en tránsito, que representa uno de los pilares de la actividad portuaria uruguaya.
La situación se vincula a cambios en las decisiones operativas de las navieras, ajustes de servicios, factores competitivos regionales y condiciones internas que han llevado a que parte del tráfico se redirija hacia otros puertos de la región.
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Pérdida de servicios y competencia regional
El diario uruguayo El País señaló que uno de los factores centrales mencionados por operadores y referentes del sector es la salida o reducción de escalas de importantes líneas navieras que solían operar regularmente en Montevideo.
Esta reconfiguración de rutas impactó directamente en los volúmenes y contribuyó a que creciera la participación de otros puertos en Argentina y Brasil, que lograron captar parte de ese flujo logístico.
A esto se suman cuestiones operativas y regulatorias que influyen en la elección de las compañías, que buscan menores costos, mayor eficiencia y mejores tiempos de operación.
En un contexto de fuerte competencia regional, cada variable termina siendo determinante.
Otros segmentos muestran comportamiento positivo
Si bien el resultado en contenedores es negativo, el puerto de Montevideo registra al mismo tiempo un desempeño favorable en otras áreas.

Se observan incrementos en el movimiento de graneles, mineral de hierro, madera, vehículos y pasajeros, lo que permite atenuar parcialmente el impacto que genera la caída del segmento de contenedores sobre el total de la actividad portuaria.
De todos modos, la señal de alerta está marcada. Operadores y representantes del sector coinciden en la necesidad de fortalecer la competitividad del puerto, optimizar procesos y recuperar atractivo operativo para evitar que la pérdida de tráfico de contenedores se consolide en el tiempo y comprometa el rol estratégico de Montevideo dentro del sistema portuario regional.










