Por Redacción ArgenPorts
La empresa DEME, uno de los grupos internacionales líderes en dragado e infraestructura marítima, expresó su respaldo al nuevo proceso de licitación de la Hidrovía Paraná–Paraguay, al que consideró más transparente y previsible, y reafirmó su compromiso de largo plazo con el desarrollo de la infraestructura marítima y fluvial en Argentina.
El anuncio se produce en medio del relanzamiento del proceso para concesionar la vía navegable más importante del país, luego de la suspensión de la licitación original en febrero pasado.
Aquel primer llamado, al que solo se había presentado DEME, fue objeto de observaciones de la Procuraduría de Investigaciones Administrativas (PIA) por presuntas irregularidades.
Ahora, la compañía con sede en Bélgica destacó “los esfuerzos de consenso y transparencia” impulsados por la Agencia Nacional de Puertos y Navegación (ANPYN) y la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), que asesoran al Estado argentino en la redacción de los nuevos pliegos.

Draga Minerva, de DEME Group, en Mar del Plata.
Un proceso clave para la competitividad exportadora
El nuevo esquema prevé una concesión de 30 años para las tareas de dragado, señalización y mantenimiento de la vía, con ingresos estimados en más de 400 millones de dólares anuales, provenientes del cobro de peajes a los buques que transitan el corredor.
Por la Hidrovía circula cerca del 80 por ciento del comercio exterior argentino, fundamentalmente vinculado al complejo cerealero–oleaginoso. La futura adjudicación definirá el mantenimiento y las obras en una infraestructura que resulta vital para las exportaciones de granos, aceites y subproductos, y para la logística del sistema portuario del litoral.
DEME, que mantiene operaciones en el país desde hace décadas, valoró el proceso actual como una señal positiva.
“Argentina es un mercado estratégico para DEME. Nuestra visión es seguir fortaleciendo nuestra presencia en los próximos años participando en proyectos de dragado, modernización de puertos, infraestructura marítima y desarrollo de energía renovable offshore”, señaló la empresa, en un comunicado al que tuvo acceso Argenports.com
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Experiencia global y tecnología sustentable
Con más de 150 años de trayectoria, DEME opera en más de 90 países, posee una flota de más de 100 embarcaciones especializadas y cuenta con 5.800 profesionales.
La compañía destacó que en Argentina ya ejecutó obras de dragado a gran escala, acumulando millones de metros cúbicos procesados.
La empresa también subrayó su liderazgo en innovación ambiental, citando la draga Minerva, la primera del mundo impulsada por gas natural licuado (GNL), que permite reducir significativamente las emisiones de CO₂, óxidos de nitrógeno y partículas contaminantes.
“Con una combinación de tecnología de vanguardia y experiencia global, DEME continúa sumando valor, innovación y sostenibilidad, impulsando el desarrollo de Argentina en este ámbito”, indicó el comunicado.
Participación multisectorial y nuevos consensos
Tras la suspensión de la licitación inicial, el Gobierno convocó mesas de diálogo con cámaras empresarias, gremios, provincias y entidades técnicas.
En esas reuniones participaron la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), que remarcaron la necesidad de avanzar hacia una profundidad de 40 pies, frente a los 34 actuales, para permitir el ingreso de buques de mayor porte y mejorar la competitividad del sistema.
El objetivo oficial es que la nueva licitación se publique antes de fin de año. Si el cronograma se cumple, el adjudicatario podría comenzar las tareas de dragado y mantenimiento durante el primer semestre de 2026, iniciando un ciclo de modernización integral de la Hidrovía.
Inversiones estratégicas y energía offshore
Además del interés por el dragado y la modernización portuaria, DEME reafirmó su voluntad de participar en proyectos de energía renovable offshore, un segmento en crecimiento en el Atlántico Sur.
Con experiencia en Europa y Asia, la compañía busca transferir su tecnología a mercados emergentes, impulsando la transición energética y la diversificación de la infraestructura marítima argentina.
“Los avances que realiza el país para mejorar la competitividad de su economía son una oportunidad para fortalecer nuestra presencia”, señaló la empresa, que destacó la previsibilidad y claridad que ofrecen los nuevos marcos institucionales en materia de concesiones portuarias y fluviales.










