Por Redacción Argenports.com
El buque Ocean Royal, un bulk carrier de 190 metros de eslora, 32 de manga y construido en 2012, continúa retenido en Puerto Quequén tras una medida cautelar dictada por el Juzgado Federal.
La orden, ejecutada por la Prefectura Naval Argentina, responde a un embargo solicitado en el marco de un conflicto por deudas vinculadas a servicios portuarios.
Según pudo saber Argenports.com, el Consorcio de Gestión de Puerto Quequén se encuentra analizando cómo acomodar la operatoria en esa estación marítima ante la eventualidad de que el buque deba quedarse algunos días más.
El reclamo fue iniciado por una firma proveedora de servicios de remolque y el monto exigido superaría el millón de dólares. Hasta tanto no se garantice el pago o se alcance un acuerdo judicial, la nave no podrá zarpar.
El Ocean Royal había ingresado a Quequén consignado por la agencia Brisamar S.A., para cargar pellets de girasol en el giro 10, con destino a exportación. La medida judicial interrumpió su operatoria y lo mantiene detenido en muelle, a la espera de definiciones.
También te puede interesar: Obras de infraestructura en muelles de Puerto Quequén
Impacto en la terminal
El caso genera preocupación en la comunidad portuaria por las consecuencias que puede traer aparejadas: demoras logísticas y mayores costos operativos.
Situación al día
En los registros oficiales de Puerto Quequén, el Ocean Royal figura aún con carga de pellets de girasol – unas 8.000 toneladas – en el giro 10, consignado por Brisamar y Viterra.
El dato confirma que, pese a estar operativo, el barco no puede dejar la terminal por el embargo judicial.
Por ahora, no hubo novedades sobre un levantamiento de la medida y el buque sigue inmovilizado a la espera de una resolución que permita su partida.