Las medidas de fuerza vienen paralizando la actividad del puerto santacruceño.
Redacción Argenports.com
Si bien al menos 10 buques de las empresas Arbumasa y Empesur tienen pedido de giro para las próximas horas, estibadores de Puerto Deseado cortaron la ruta 281 en reclamo de una mayor operatoria por esa estación marítima.
“Todos los barcos se están yendo al norte y esto ya parece un puerto fantasma”, aseguraron.
“Decenas de estibadores que se desempeñan en el puerto local mantienen cortada la ruta 281, a unos 13 kilómetros de esta ciudad en reclamo de una mayor frecuencia en los arribos de barcos que operan sobre el langostino”, señaló el medio Mar y Pesca Noticias Patagónicas.
Según la información, el corte de ruta es total para los camiones que traen materia prima o insumos para la industria pesquera, también para los que se desempeñan en la minera Cerro Moro, pero se habilita cada dos horas para dejar pasar a los vehículos particulares.
El movimiento de camiones se encuentra detenido en la ruta 281.
“Lamentablemente tuvimos que llegar a esta medida porque estamos pidiendo desde hace días la presencia del ministro de Trabajo, Teodoro Camino, de la ministra de la Producción, Silvina Córdoba y de la Secretaria de Pesca, Lucrecia Bravo, para que vengan a arreglar esta situación porque los barcos se están yendo a descargar en otros puertos y nosotros no tenemos trabajo, pero hasta el momento no hay respuestas”, apuntó un estibador al acotar que las autoridades locales tampoco les dieron una solución.
Cuando se le consultó sobre una lista difundida por el puerto sobre un total de 10 arribos programados entre hoy y el lunes con las bodegas cargadas de langostino, el trabajador indicó que ese número es insuficiente para la cantidad de estibadores.
“Diez barcos no hacen la diferencia, porque son dos empresas que están descargando y ya todas se están llevando los barcos al norte porque el langostino está más arriba, y dicen que no les conviene que pierden plata”, agregó.
Muelles en puerto Deseado, foto Jorge Luis Fernández Bertin / Google.
Si bien la medida estuvo dirigida a las empresas de manera directa, pero como a veces sucede en estos casos, los mayores perjudicados fueron los operarios que se desempeñan dentro de las plantas pesqueras, se trata de un grupo de 600 personas que elaboran langostino fresco que llega a la localidad a través de camiones, y al no poder ingresar esos camiones los obreros, muchos de ellos contratados por la temporada quedan sin trabajo.
En tanto, la subsecretaria de Pesca de la provincia de Santa Cruz, Lucrecia Bravo lamentó la medida de fuerza y aseguró que en las últimas estadísticas publicadas por el Ministerio de Agricultura y Pesca de la Nación se puede ver que el puerto de Deseado tuvo un crecimiento en las descargas respecto al año pasado.
Los piquetes cortan el acceso a Puerto Deseado.
“Lamento mucho esta medida de fuerza porque desde el Estado se apostó a fortalecer la actividad en el puerto y al trabajo en las plantas, costó mucho convencer a las empresas que apuesten por el fresco, y ahora hay cientos de personas que se desempeñan en las plantas pesqueras que, por culpa de esta medida se quedan sin poder trabajar”, precisó a Mar y Pesca Noticias Patagónicas.
La funcionaria dijo que con esta medida de fuerza se rompe la cadena productiva “de un puerto que es el tercero más importante del país, y el más importante de la provincia no hay una lógica porque el puerto mantuvo un movimiento constante a pesar de que el langostino se encuentra más al norte”.
Al referirse a las estadísticas pesqueras, la funcionaria sostuvo que las descargas de langostino crecieron un 42% respecto al año pasado.
“Hasta el 20 de julio de 2022 se descargaron 8.670 toneladas de langostino contra 6.124 toneladas descargadas en 2021 en idéntico período, es decir que si hablamos de números este año la comparativa nos da una diferencia de 2.546 toneladas más que se descargaron este año”, detalló.