Opinión: Potencial exportador de GNL

30 noviembre 2022

El sector necesita reglas claras y una política energética a largo plazo para poder desarrollar toda la potencialidad que tiene el país.


El mercado en el mundo para el GNL argentino está y la exportación, con respecto al precio de venta del GNL, y considerando el flete, es completamente rentable. Foto Argenports.com


Por Gabriela Aguilar (*)

(*) Gerenta General de Excelerate Energy en Argentina y VP para Latinoamérica.

   Argentina cuenta con el potencial natural y la capacidad técnica para convertirse en un tiempo relativamente breve en exportador de GNL a un mundo que requiere cada vez más de este tipo de recursos para garantizar la seguridad energética de los países y avanzar en la transición a fuentes renovables. 

   Puede ser un actor fundamental en ese proceso, pero, para ello, se necesita el desarrollo de infraestructura clave y condiciones que se mantengan en el tiempo.

   El proyecto del gasoducto Néstor Kirchner es central para que el país aproveche su capacidad energética y sin duda nos acercaría al objetivo de consolidar un modelo exportador energético robusto y sostenible. Pero, para ello, es necesario acompañar el avance en infraestructura con previsión y constancia respecto de reglas que organizan la actividad. 

   El objetivo a no perder de vista es garantizar que las inversiones se aseguren y mantengan. En ese sentido, el Plan Gas.Ar marcó objetivos claros y un rumbo que permite pensar y planificar el aumento de la producción necesario para exportar de forma consistente a un mundo que nos abre las puertas.

   Desde Excelerate Energy siempre apoyamos y seguiremos apoyando a la Argentina en este camino de desarrollo, queremos consolidar una presencia no solo con nuestras soluciones flotantes sino también en otras partes de la cadena de valor del GNL. En ese sentido son destacables los esfuerzos planteados por el Plan Gas.Ar, ya que siempre es mejor tener una dirección clara a no tenerla.

   El sector necesita reglas claras y una política energética a largo plazo para poder desarrollar toda la potencialidad que tiene Argentina. 

   El mundo está viendo una crisis cómo ninguna otra en materia energética y en especial en lo que se refiere a gas. Sin embargo, no es una crisis de disponibilidad de recursos: existen en cantidad suficiente. Se trata de una crisis logística de acceso, dadas las consecuencias geopolíticas de la guerra en Ucrania. 

   Muchos países de Europa y de la región ven al GNL como una solución a estos problemas, a la vez de ser un gran mecanismo para la transición energética. El mercado en el mundo para el GNL argentino está y la exportación, con respecto al precio de venta del GNL, y considerando el flete, es completamente rentable. 

   Por ello, si bien y cómo dijimos antes, aún falta tiempo para establecer una matriz energética exportadora en lo que se refiere a GNL, debemos continuar transitando el camino de la previsibilidad que es el gran impulso conceptual para el desarrollo del sector.

   Fuente: Página 12.