Por Redacción Argenports.com
La campaña 2025/26 de maíz se encamina hacia un escenario de enorme volumen productivo y un impacto logístico que marcará un antes y un después para el sistema portuario argentino.
Con una proyección de 61 millones de toneladas, la mayor de la historia, y una fuerte participación del maíz temprano, el flujo hacia los puertos se concentrará de manera adelantada y masiva entre marzo y abril del próximo año.
Las recientes recargas de humedad y la regularidad de lluvias consolidaron condiciones óptimas de desarrollo para gran parte del maíz temprano del país.
Se trata de uno de los mejores escenarios de los últimos años, con casi nulas áreas calificadas como regulares o malas. En este contexto, el potencial de rendimiento abre la puerta a un salto productivo significativo.
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Maíz temprano en niveles excepcionales
Según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario, el área sembrada con maíz temprano alcanzó este año un récord y eso define el comportamiento del mercado para 2026.

Sobre la base de rindes históricos y distintos escenarios productivos, las estimaciones indican que la producción de maíz temprano podría ubicarse entre un 40% y un 70% por encima del promedio de los últimos cinco años, dependiendo del comportamiento final de los rendimientos.
Si se confirman estas perspectivas, el volumen de maíz disponible para ingresar al circuito comercial en marzo será extraordinario, con un impacto directo sobre logística terrestre, almacenaje y programación portuaria.
Un desafío logístico sin precedentes para los puertos
El efecto se concentrará en los puertos del Gran Rosario, donde se prevé que el ingreso de camiones podría ser hasta un 80% superior al promedio de los últimos diez años y entre 25% y 30% más alto que el máximo histórico previo para ese período.
Este reacomodamiento de flujos adelantará la estacionalidad típica de la cosecha gruesa, coincidirá con el inicio de la cosecha de soja y se sumará a un contexto en el que el trigo también registra volúmenes muy elevados.
En otras palabras, el sistema portuario deberá administrar simultáneamente tres grandes frentes de oferta.
Este escenario requerirá coordinación operativa, infraestructura eficiente, planificación de turnos de descarga y capacidad de respuesta logística para evitar cuellos de botella que puedan afectar tiempos y costos.

Impacto comercial y señales del mercado
El mercado ya comienza a reflejar estas expectativas. La relación entre contratos de maíz temprano y tardío muestra que el “premio” por disponibilidad temprana prácticamente desaparece, algo inusual en comparación con la última década.
La presión de cosecha se perfila intensa y anticipada, lo que podría incidir en precios y estrategias comerciales del sector.
Lo que viene
Si se mantienen las condiciones agronómicas actuales y los rindes acompañan las proyecciones, la campaña 2025/26 no solo marcará un récord productivo, sino también un récord logístico, especialmente en marzo y abril, cuando los puertos argentinos podrían enfrentar el mayor flujo de maíz de su historia.
En ese contexto, la eficiencia portuaria, la previsibilidad operativa y la capacidad del sistema logístico nacional serán claves para absorber este volumen extraordinario y sostener la competitividad exportadora del país.










