Personal del Senasa continúa con sus acciones de prevención y control en puertos, verificando las condiciones sanitarias de cada uno de los buques.
Redacción Argenports.com
El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), continúa con sus acciones de prevención y control en puertos, verificando las condiciones sanitarias de cada uno de los buques que arriban a las terminales de Buenos Aires.
Las acciones tienen por objetivo evitar el ingreso de plagas, entre ellas Lymantria dispar, raza asiática y japónica, ausente en la Argentina.
En el marco de la Resolución 764/2020 del Senasa, agentes del Centro Regional Buenos Aires Norte, pertenecientes a las oficinas San Pedro y Zárate, recorren las instalaciones de estos buques, verificando cada sector.
Se observa con mayor detenimiento las zonas más propensas a encontrar este tipo de plagas -como luminarias, ventanas, rejillas de ventilación y otros sectores de cubierta- donde las hembras de ese insecto, depositan la masa de huevos.
Es así que, como parte del procedimiento de inspección se buscan tanto las masas de huevos, como demás estadios de la plaga.
Llegado el caso de encontrarse un ejemplar sospechoso, se activan los protocolos sanitarios para su posterior envío a análisis en laboratorio oficial y, en caso de ser necesario, se remueve y destruye la masa de huevos o los ejemplares sospechosos detectados.
En cualquiera de los casos, se notifica tanto al Capitán como a la Dirección Nacional de Protección Vegetal, mediante un acta de constatación para que el buque continúe su navegación por las vías fluviales y marítimas del país.
Al respecto, Guillermo Ruffo, coordinador de Protección Vegetal del Centro Regional Buenos Aires Norte del Senasa señaló:
“La Lymantria dispar, denominada vulgarmente como polilla gitana, raza asiática y raza japónica, es una plaga cuarentenaria ausente en nuestro país, la cual está considerada una de las plagas defoliadoras más importante a nivel mundial, ya que se alimenta de más de 600 especies de árboles y arbustos forestales, frutales y ornamentales de todo el mundo.
“A la fecha –continuó--, llevamos una detección de insectos sospechosos y un envío de muestra a laboratorio”.
Estas acciones de control sanitario, realizadas por nuestros agentes regionales, se enmarcan en la Resolución Senasa 764/2020.
Esta establece que cuando un buque navega por áreas con presencia de esta plaga, al llegar a un puerto argentino, debe presentar un certificado oficial emitido en origen, el cual debe indicar que se encuentra libre de Lymantria dispar y/o ser inspeccionado, en este caso por el Senasa, para confirmar su ausencia, ya que el casco del buque actúa como fuente de dispersión de la Lymantria dispar.