Desde el inicio de la concesión incrementó el plantel de locomotoras activas en un 260% y los vagones en un 37%, con inversiones concretadas por más de 225 millones de dólares.
Redacción Argenports.com
Hace 30 años nacía Ferroexpreso Pampeano, la primera concesionaria del transporte privado de cargas argentino.
En estas tres décadas la empresa de las locomotoras rojas pudo demostrar que en Argentina es posible brindar un servicio de transporte ferroviario de cargas de calidad, los 365 días del año, y con alto valor agregado para el crecimiento del país
FEPSA transporta principalmente granos y subproductos del agro desde los centros de acopios y fábricas que se encuentran dispersos en el centro y oeste de la provincia de Buenos Aires, este y norte de La Pampa y sur de Santa Fe hacia los puertos de Bahía Blanca y Rosario.
La empresa cuenta con seis bases operativas en las localidades de Ingeniero White, Darregueira, Coronel Suárez, General Pico, Coronel Granada y Villa Diego.
De esta forma facilita al sector agrícola mover su producción en grandes volúmenes, generando menores gastos a la cadena productiva, descongestionando rutas y preservando la seguridad de las comunidades.
También, aunque en menor escala, la compañía brinda servicio logístico a la industria petrolera.
Ferroexpreso Pampeano es el único ferrocarril transportando a los dos principales puertos argentinos: Rosario y BahÍa Blanca (Ingeniero White), con más de 3.000 kilómetros de vías operativas y más de 1.000 colaboradores.
La compañía tiene más de mil colaboradores, 3.000 kilómetros de vías operativas, 50 locomotoras y 2.000 vagones.
En 30 años FEPSA posee una tasa de crecimiento anual del 5.3% y, como uno de los elementos a destacar puede decirse que desde el inicio de la concesión se incrementó el plantel de locomotoras activas en un 260% y de vagones en un 37%, con inversiones concretadas por más de 225 millones de dólares.
Los convoyes cerealeros de FEPSA son una presencia acostumbrada en una amplia región.
Hoy Ferroexpreso Pampeano atiende a más de 100 clientes: exportadores, acopiadores, productores con plantas sobre la red.
El 90% de su transporte es agroindustrial y en el caso de la exportación de granos por el puerto de BahÍa Blanca, la empresa tiene el mérito de superar el 30 por ciento.
En ese rubro, Ferroexpreso Pampeano es un socio logístico clave para más de 100 clientes entre productores, acopiadores y exportadores del sector agroindustrial, uno de los principales motores económicos y productivos de nuestro país.
Talleres ferroviarios de Spurr (arriba) e Ingeniero White (abajo). Ambos en Bahía Blanca.
Otro dato relevante, a la hora de analizar estos 30 años, es que desde noviembre de 1991 los clientes de FEPSA realizaron inversiones sobre el ferrocarril por más de 90 millones de dólares, promovidas por acuerdos comerciales, y de esta manera se duplico la capacidad y calidad de almacenamiento de granos.
Control de tráfico, otra pieza clave en el sistema operativo.
Por el tipo de empresa de que se trata, el factor climático afecta mucho y en distintos momentos de la concesión, el impacto de las inundaciones requirió obras importantes para asegurar la circulación de los trenes.
Cabe recordar que en algunas ocasiones la irrupción del agua deterioró la infraestructura ferroviaria existente, llegando a dejar fuera de operación hasta el 50 por ciento de las vías.
En varias oportunidades, las inundaciones fueron un duro escollo para la prestación del servicio.
Estos fenómenos climáticos, sumado a los vaivenes del agro y a las distintas crisis económicas del país, llevaron a la empresa a tener años de rentabilidad negativa que pusieron a prueba su continuidad.
Sin embargo, fueron todas cuestiones que pudo enfrentar gracias a su equipo de colaboradores y al acompañamiento de gremios y accionistas.
El perfecto estado de mantenimiento de las locomotoras y material rodante es otra de las características de la empresa.
Para quienes prefieren los números a las palabras, pueden mencionarse que son más de 95 millones las toneladas de trigo, maíz y soja transportadas a las puertos de Bahía Blanca y Rosario.
Además, 1,8 millones de vagones cargados arribaron a esas estaciones portuarias y clientes a través de acuerdos comerciales construyeron 46 plantas.
Y por si fuera poco, FEPSA lleva más de 55 millones de kilómetros recorridos, lo que equivale a más de mil vueltas al planeta Tierra.
Por eso hoy, 30 años después de haberse puesto en marcha, la empresa que llegó “para llevar la riqueza de nuestro suelo, desde el corazón del país hacia el mundo entero”, cumplió con creces la responsabilidad asumida y los objetivos trazados.