Fin del reinado de los megaportacontenedores: los armadores van por buques más pequeños

04 enero 2025

Ls navieras ahora priorizan buques de tamaño medio, capaces de responder con mayor rapidez a las crecientes incertidumbres geopolíticas, económicas y ambientales.


"El buque de 16.000 contenedores se convertirá en el caballo de batalla de las navieras", afirman los especialistas. Foto Evolution Forwarding.


Por Redacción Argenports.com

   La era de los gigantescos buques portacontenedores, ícono del comercio marítimo global, parece estar llegando a su fin.

   Las navieras ahora priorizan buques de tamaño medio, capaces de responder con mayor rapidez a las crecientes incertidumbres geopolíticas, económicas y ambientales.

   Durante décadas, el comercio marítimo estuvo dominado por megabuques diseñados para transportar más de 18.000 contenedores.

   Sin embargo, la demanda de embarcaciones más pequeñas está ganando terreno. Según datos de la agencia naviera Braemar, reproducidos por el sitio elEconomista.es,  en 2025 se entregarán solo seis buques de más de 17.000 TEU (unidad equivalente a 20 pies), mientras que se completarán 83 buques medianos, de entre 12.000 y 16.999 TEU, casi cinco veces más que en 2020.

   Jonathan Roach, analista del mercado de contenedores en Braemar, explica que el "tibio" comercio mundial y la saturación de buques masivos han reducido el interés por estas embarcaciones gigantes.

   "El buque de 16.000 contenedores se convertirá en el caballo de batalla de las navieras", afirma.

Factores detrás del cambio

   Según el mencionado medio español, el desplazamiento del comercio de China hacia otros países asiáticos como India y Vietnam ha sido un factor clave. Los buques más pequeños permiten mayor flexibilidad, especialmente cuando ya no es viable llenar megabuques en pocos puertos.

   A esto se suma el endurecimiento de las normativas ambientales. Los armadores enfrentan incertidumbre sobre qué combustibles y tecnologías serán necesarios para cumplir con los objetivos de cero emisiones netas para 2050.

   Además, las crecientes interrupciones en las rutas comerciales han evidenciado la vulnerabilidad de los buques más grandes.

   Los recientes ataques en el Mar Rojo, atribuidos a los hutíes de Yemen, han encarecido los costos de transporte y han obligado a desviar rutas, reduciendo el uso del estratégico Canal de Suez.

   Según William MacLachlan, socio del bufete HFW, "los buques más pequeños pueden adaptarse más fácilmente a los cambios macroeconómicos y geopolíticos".

Impacto geopolítico y económico

   El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca y su amenaza de imponer nuevos aranceles a China refuerzan esta tendencia.

   Los países y las empresas buscan diversificar sus fuentes de abastecimiento para reducir su dependencia de Pekín, una estrategia que se alinea con las políticas de la Unión Europea de "reducción de riesgos".

   Peter Sand, analista jefe de Xeneta, subraya que los megabuques solo son rentables si están completamente cargados. De lo contrario, generan pérdidas significativas. Esto ha llevado a las navieras a replantear su estrategia.

Un giro tras décadas de expansión

   Aunque el auge del comercio marítimo impulsó durante años la construcción de megabuques, la tendencia había comenzado a revertirse. Sin embargo, el repunte de los beneficios del sector en 2024 llevó a pedidos adicionales de embarcaciones gigantes, como los 10 buques de 21.000 contenedores encargados por Mediterranean Shipping Company (MSC).

   Aun así, los problemas en rutas clave como el Mar Rojo y el Canal de Suez han reafirmado la importancia de la flexibilidad. Los buques de tamaño medio, menos dependientes de grandes rutas como Asia-Europa, están mejor preparados para enfrentar las disrupciones y adaptarse a un comercio mundial en constante transformación.