El fuego produjo graves daños en la embarcación Santiago, dedicada a trabajos de batimetría. Fotos Argenports.com y PNA.
Redacción Argenports.com
Muy agitadas fueron las últimas horas en ambos extremos del estuario de Bahía Blanca.
Por un lado, ayer un gran incendio afectó a una lancha en puerto Galván, mientras que a la altura de la boya 12, a una hora de navegación al sur de puerto Rosales, otra se hundió sin que se registraran víctimas.
Según pudo saber Argenports.com, sobre el mediodía de la víspera, la lancha Santiago, propiedad de una empresa de Mar del Plata y dedicada a tareas de batimetría, tomó fuego mientras era sometida a trabajos de soldadura, durante el recambio de chapas.
La embarcación, dedicada normalmente a servicios generales, se encontraba en seco en proximidades del varadero, y sufrió daños de magnitud.
Mirá el short sobre el tema en el canal de you tube de Argenports.com sobre el incendio de la lancha Santiago
El otro hecho se produjo durante la mañana de hoy, cuando la embarcación Torito, perteneciente a la empresa Lanchas del Sur, navegaba hacia el fondeadero exterior, a la altura de la boya 12, para proveedor de balsas salvavidas y tambores de aceite a un buque de ultramar.
Allí fue cuando un golpe de ola la hizo que diera vuelta campana y se hundiera rápidamente.
Sus tres tripulantes, un patrón y dos marineros, permanecieron varios minutos en el agua hasta que fueron rescatados con principio de hipotermia por la lancha Akort, que afortunadamente se encontraba en las inmediaciones.
La posición de la Akort muestra el área donde se produjo el hundimiento de la Torito.
Luego fueron llevados hasta puerto Rosales, donde los esperaba una ambulancia, y uno de ellos debió ser llevado a un centro asistencial.
“Antes del hundimiento alcanzaron a pedir auxilio y si no estaba esa lancha cerca, no la contaban”, dijo una de las fuentes consultadas.
Según informó Prefectura, la asistencia comenzó cuando el capitán de la lancha motor Torito, de bandera argentina, realizó una llamada vía frecuencia radioeléctrica con la Autoridad Marítima Argentina, informando que estaban sufriendo un inconveniente mientras navegaban cerca de la boyas 12 y 11, para posteriormente perder, totalmente, la comunicación.
Inmediatamente, zarpó hacia el lugar el guardacostas GC- 71 La Plata mientras desde el Centro de Gestión de Trafico Marítimo se coordinaba con las embarcaciones que navegaban por la zona para que se aproximen a la zona de la emergencia.
Posteriormente, el capitán de la lancha Akort informó que avistó dos balsas salvavidas con tres tripulantes, respectivamente, a bordo y procedió a embarcarlos.
Finalmente, los tres hombres fueron traspasados a la lancha Gringa XX la cual los condujo finalmente hacia el puerto local.
Una vez en tierra, el capitán de la embarcación siniestrada manifestó que debido al mal clima, sufrieron un ingreso de agua hacia la sala de máquinas, lo que provocó el hundimiento de la lancha.